El Gobierno ha recibido el mensaje de Junts, ha tomado nota y ha percibido su peligro. La reacción, más allá del mensaje de tranquilidad que lanzaron en un primer momento, ha sido la de ponerse manos a la obra con un primer gesto: el desbloqueo en la comisión de Justicia del Congreso de la proposición de ley de Junts para luchar contra la multirreincidencia.

La iniciativa permanecía estancada en la comisión desde el mes de febrero con la ampliación sucesiva del plazo de enmiendas decidida por la mayoría que ostentan los dos partidos gubernamentales en la Mesa del órgano.

La decisión adoptada esta mañana, apenas 24 horas después del anuncio de ruptura definitiva de Junts con el Gobierno, supone que la próxima semana la comisión se reunirá para constituir la ponencia que debe emitir dictamen sobre la proposición de ley.

Se trata pues únicamente de un primer gesto ya que la iniciativa podría nuevamente entrar en fase de letargo en el trámite de ponencia.

La proposición de ley de Junts ha sido frenada por la mayoría gubernamental durante meses porque en realidad tendría muchas posibilidades de acabar siendo aprobada con apoyo del bloque de oposición, al que previsiblemente taambién podría sumarse el PNV.

Junts registró su proposición de reforma del Código Penal y de la Ley de Enjuiciamiento Criminal en abril del año pasado y el Pleno de la Cámara la tomó en consideración aceptando así tramitarla cinco meses más tarde, en septiembre. A partir de ahí el plazo de presentación de enmiendas se fue prorrogando una semana tras otra hasta el pasado mes de febrero. Desde entonces ha quedado varada hasta ahora cuando por fin se ha anunciado la convocatoria de su ponencia a fin de empezar a estudiar a puerta cerrada todas las enmiendas presentadas.