Japón confirmó el viernes que solicitó a Alemania la detención y extradición del canadiense Paul Watson, fundador de la entidad Sea Shepherd, días antes que el ecologista abandone el territorio alemán pese a encontrarse en libertad bajo fianza y en arresto domiciliario.
La embajada de Japón en Berlín informó a la AFP que el 19 de julio había enviado a la cancillería alemana documentos "en los que la Guardia Costera de Japón pedía la detención de Paul Watson con el objetivo de su extradición".
En una compleja maraña legal que involucra países de varias partes del mundo, Costa Rica presentó su propio pedido de extradición de Watson, a quien acusa de haber provocado un serio incidente entre el barco "Sea Shepherd" y un navío de Costa Rica de pesca de tiburones en 2002.
Watson es acusado de "poner en peligro la vida de la tripulación del barco" costarricense, aunque el canadiense podría enfrentar cargos más graves en Japón, donde el barco "Sea Shepherd" ya es conocido por agresivas maniobras contra navíos balleneros.
El ecologista canadiense fue detenido en el aeropuerto de Fráncfort en mayo y permaneció bajo arresto durante una semana, antes de recuperar la libertad mediante el pago de una fianza de 250.000 euros y la obligación de presentarse a la policía alemana dos veces al día.
Sin embargo, esta semana la fiscalía de Fráncfort admitió que Watson quebró la libertad bajo fianza el 22 de julio y su abogado reconoció que había abandonado el país.
De acuerdo con la embajada japonesa, el pedido de Tokio por la extradición de Watson no está relacionado con las tratativas costarricenses. "El pedido de extradición presentado por Costa Rica es un asunto que apenas se refiere a Alemania y Costa Rica. Japón no hará comentarios sobre ello", informó la embajada.
El "Sea Shepherd" es conocido por sus acciones para perturbar las faenas de balleneros japoneses en regiones tan remotas como la Antártida y la utilización de métodos que incluyen el abordaje de esos barcos.
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